Si notas que tus uñas se quiebran fácilmente, se ven opacas o no crecen como te gustaría, no estás sola. Muchas veces, el estrés, la alimentación o los productos agresivos pueden debilitarlas. Pero tranquila, aquí te compartimos algunos consejos fáciles y efectivos que puedes empezar a aplicar desde hoy.
Hidrátalas a diario: Al igual que la piel, las uñas también necesitan hidratación. Usa aceites naturales como el de almendras o coco para masajear tus cutículas y mantenerlas suaves.
Evita productos agresivos: Quitaesmaltes con acetona o jabones fuertes pueden resecar tus uñas. Opta por productos suaves y, si puedes, usa guantes cuando laves o limpies.
Incluye biotina en tu dieta: Este nutriente ayuda al crecimiento saludable de uñas y cabello. Lo encuentras en alimentos como huevos, nueces, plátanos y espinacas.
No las uses como herramientas: Abrir latas, rascar superficies o quitar etiquetas con las uñas puede debilitarlas. Intenta protegerlas evitando ese tipo de gestos diarios.
Dale descansos al esmalte: Aunque nos encanta llevarlas siempre arregladas, también necesitan respirar. De vez en cuando, dales unos días sin esmalte y aprovecha para aplicarles un fortalecedor.
Con pequeños cambios en tu rutina, tus uñas pueden volverse más fuertes, sanas y bonitas. Y si quieres un empujón extra, en Stiletta te ayudamos con tratamientos especializados que cuidan tu belleza natural desde el primer detalle.